Casi todas las organizaciones utilizan sistemas de información en sus procesos de producción centrales. Como resultado de esto, han aumentado la dependencia de los sistemas y la vulnerabilidad ante los errores de los sistemas y los datos de mala calidad.
Los adelantos en las técnicas de almacenamiento de datos han reducido el costo y aumentado la eficiencia de la violación rutinaria de la privacidad individual.
Los adelantos en las técnicas de extracción de datos de bases de datos grandes son una tercera tendencia tecnológica que intensifica las preocupaciones éticas, porque permiten a las compañías encontrar una gran cantidad de información personal detallada acerca de los individuos.
Las compañías con productos de venta compran a estas fuentes información pertinente para poder dirigir con mayor exactitud sus campañas de marketing. El real problema es que no sólo estas honorables compañías están dispuestas a comprar dicha información, sino que individuos particulares o asociados para el crimen también lo están.
Por último los adelantos en el trabajo con redes, incluyendo a internet, prometen reducir considerablemente los costos de trasladar y acceder a grandes cantidades de datos pero invadiendo así la privacidad en una escala y con una precisión hasta ahora inimaginables.
Personalmente creo que las cuestiones de ética en esta era de la información son las siguientes ¿en qué condiciones se debe invadir la privacidad de otros? ¿Qué justifica inmiscuirse en la vida de otros mediante vigilancia, intervención de mercados o cualquier otro mecanismo? ¿se tiene que informar a las personas que se les está monitoreando?